CARTA A LOS PERDIDOS. (CON COPIA A LOS BUSCADORES).
Queridos compañeros de viaje: nómadas, psiconautas, buscadores...Aunque nos llaman de muchas maneras, para nosotros la vida es una escalera de peldaños invisibles. Una prueba donde mil posibilidades se abren a cada instante como flores que dejan una estela de polen.


No os obsesionéis con la meta. Dejad que el camino os insinúe hacia donde vais; como en Ítaca: que el camino sea largo. Que sean muchas las mañanas en que lleguéis a puertos que nunca antes visteis.
Muchos miran tan lejos que no encuentran lo que buscan, otros ya no buscan nada. Es cierto: en la vida-basura, trabajamos para nada, desperdiciamos nuestro tiempo y lo llenamos de imposibles explicaciones. Pero por debajo, dentro y fuera, fluye la transparencia de la sencillez.

Todos, en el fondo, hemos buscado, intentado buscar, soñado buscar
o buscado en sueños el camino que nos mejore y explique la vida. Esa búsqueda es precisamente lo humano.

Caminante:El camino, no tiene intermediarios ni propietarios. Hay maestros y acompañantes pero los de verdad no cobran tasas.

El camino, ya lo sabéis, es para quien lo hace.
Obra: Caspar David Friedrich.
"Caminante sobre el mar de niebla" (1817-18).







1 comentarios:

Jesús M. S. dijo...

Buscar siempre está bien. Cada vez se hace menos. Parece que las cosas cada vez se tienen más claras y que somos cada vez más cobardes. La lucha por convertirse en amante de medios, que no de fines, debe librarse a diario y sabiendo que no se actúa de forma imprudente al intentar alejarse de metas, ya que, en gran medida, te impondrán nuevamente nortes que, quizás, te sean también ajenos.